Desde que tengo uso de razón, siempre me he preguntado en qué se basan los autores de los libros, para crear sus personajes.

Francisco Palacio, con este libro, deja muy claro que se basa en la vida cotidiana. ¿Quién no tiene en su bloque al típico portero cotilla? o el vecino pesado que está siempre en tu casa, las reuniones del bloque…

Este autor utiliza un lenguaje sencillo, por lo que pueden comprender su lectura todos(as) sus seguidores. Desde mi punto de vista, esta novela me recuerda mucho a las series de televisión, que se basan en una comunidad de vecinos, donde siempre hay líos entre ellos.

Juan Cacho, es un personaje que demuestra la realidad de los días cotidianos de una persona normal y corriente de barrio. Éste se dedica a dar clases a un vecino, llamado Ángel y durante los veranos en una academia denominada ¨La Milagrosa¨.

Un día va y se le cruza una tal Amparo, que resulta que es alumna suya, de la cual se enamora. Un tal Ángel que tiene un lio por el chat. Trágica reunión de vecinos, etc.

Es un libro que te engancha leyendo, debido a sus múltiples situaciones y sucesos de Juan Cacho en su barriada en el día a día de un verano.