Mariló
ANTES

Una tarde de noviembre, llegué a casa, ví que mi compañera de piso no estaba, pensé que habría bajado a comprar algo. Pasaron las horas y mi amiga no llegaba, empecé a preocuparme, por lo que decidí llamarla, para saber de ella. Llamada tras llamada, seguía sin coger el teléfono. La madre preocupada,al ver que todos los días la llamaba, me llamó a mi, me preguntó que si sabía algo de su hija, que había estado llamándola varias veces, pero que no contestaba. Yo me puse en contacto inmediatamente con sus amigas, ninguna sabían nada.

Las horas pasaban y seguía sin aparecer, me puse a pensar en todo, en si la habían atropellado y estaba en el hospital o simplemente estaba cenando con una amiga de la universidad. En fín, se me pasaron por la cabeza multitudes de cosas.

Los minutos se me hacían horas, hasta que al final escuché las llaves, me puse a temblar de miedo, por lo que me podría encontrar tras esa puerta. Cuando la ví entrar, empezamos las dos a llorar, ella por todo lo que había sucedido y yo por la alegría de verla que estaba bien.

Cuando nos tranquilizamos, ella me empezó a contar todo lo que le habia ocurrido. Resulta que habia estado con una amiga para tomar algo y cuando miró el reloj, ella entendió que eran las 23:30 cuando supuestamente eran las 00:30.

Muchas veces cuando recordamos esa noche, nos reímos de todo, pero verdaderamente lo pasé mal.

DESPUÉS

Una tarde de noviembre llegué a casa, vi que mi compañera de piso noestaba y pensé que habría bajado a comprar algo. Pasaron las horas y miamiga no llegaba, empecé a preocuparme por lo que decidí llamarla parasaber de ella. Llamada tras llamada, seguía sin coger el teléfono. Lamadre preocupada también me llamó y me preguntó que si sabía algo de suhija, que la había estado llamándola varias veces, pero que no contestaba.Yo me puse en contacto inmediatamente con sus amigas, ninguna sabía nada.

Las horas pasaban y seguía sin aparecer, me puse a pensar en todo, en sila habían atropellado y estaba en el hospital o simplemente estaba cenandocon una amiga de la universidad. En fin, se me pasaron por la cabezamultitudes de cosas.

Los minutos se me hacían horas, hasta que al final escuché las llaves, mepuse a temblar de miedo, por lo que me podría encontrar tras esa puerta.Cuando la vi entrar, empezamos las dos a llorar, ella por todo lo quehabía sucedido y yo por la alegría de verla que estaba bien.

Cuando nos tranquilizamos, me empezó a contar todo lo que le habíaocurrido. Resulta que había estado con una amiga para tomar algo y cuandomiró el reloj, ella entendió que eran las 23:30 cuando supuestamente eranlas 00:30.

Muchas veces cuando recordamos esa noche, nos reímos de todo, peroverdaderamente lo pasé mal.
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